La República Islámica de Egipto
Los avatares de la humanidad están ingresando irremediablemente en
la era de los tiempos oscuros, en los tiempos de las tinieblas perpetuas donde la
indiferencia de occidente se ha eternizado definitivamente como un gran pecado
final.
Mohamed
Mursi, miembro de la cofradía de los Hermanos Musulmanes, se ha convertido en
el nuevo presidente electo de Egipto ante un estallido de júbilo en la plaza
Tahrir de El Cairo, donde miles de sus simpatizantes gritaban “Alá akbar” (Dios
es grande).
Mientras observo las dantescas imágenes de las
manifestaciones en El Cairo siento la sensación de estar observando un mundo
muy complejo, regido por extrañas e impenetrables reglas muy difíciles de
comprender a priori de un análisis profundo.
Un mundo kafkiano
enmarcado y protagonizado por realidades circundantes y actores protagónicos
que se influyen y potencian mutuamente, en este preciso momento donde terminan apabullados
y derrotados los valores, los intereses y la cultura de occidente.
La amenazante
presencia de las organizaciones terroristas como Hamas y Hezbollah –
patrocinados por Irán – que se dedicaron por muchos años ha intimidar a la
dirigencia árabe moderada tiene hoy grandes motivos para festejar el definitivo
fortalecimiento del Islam radical en Egipto.
En el marco de un
Egipto que estuvo desde hace mucho tiempo intentando - sin éxito -
contener la creciente popularidad de la Hermandad Musulmana
y la presencia no disimulada de los apaciguadores dirigentes europeos y
norteamericanos que intentaron sembrar una supuesta paz forzada y contranatural
con un telón de fondo tan inhóspito y salvaje, que solo sirvió para apenas recubrir
sus múltiples y permanentes intereses estratégicos y económicos.
El Islam radical de Irán,
Al Kaeda, Hezbollah, Hamas, Hermanos Musulmanes, Siria, etc. continúan
trabajando a tiempo completo para expulsar "las satánicas"
influencias occidentales en la región y a afirmar definitivamente las
medioevales bases de sociedades cerradas y autoritarias.
Una revolución
islámica que mira con lascivia hacia una Franja de Gaza donde hoy todo continua
igual o peor que antes donde los cambios
no existen y ni siquiera son ficticios, con su población cada vez mas
paupérrima y hambrienta que nunca, gobernada por las mismas bandas de facinerosos
y mantenida por la asistencia para los refugiados de la ONU, por donaciones
humanitarias directas de gobiernos de Europa y del Golfo y por el aporte
permanente, económico, militar e ideológico y ya no tan solapado de los
clérigos iraníes.
Una frontera entre
Egipto y Gaza a través de la cual el gobierno de Egipto ya no intentaría frenar
el contrabando de armas desde el Sinaí hacia la franja o lo estimularía, convirtiéndose
hoy en la pesadilla tan temida de caer en poder de un régimen mas que simpatizante
con Hamas.
Se acentuaría la
estrategia de Hamás consistente en bloquear el proceso de paz y negar a
Israel el derecho a existir que podría lograr en este contexto, la
posibilidad de acumular fuerzas y relaciones en la región para ganarse
definitivamente la calle palestina.
Estimularía una
ventaja arrolladora para Siria e Irán frente a los europeos y norteamericanos
en el Líbano que permitiría que la Hezbolláh se apodere definitivamente del gobierno
libanés creando un creciente foco de inestabilidad e inseguridad en la frontera
norte de Israel, ahora si peligrosamente pegada al Irán nuclear de Mahmud
Ahmadinejad.
Sin lugar a dudas
este es el alarmante escenario probable pronosticado insistentemente por los
especialistas en medio oriente, la rápida islamización de Egipto y de varios
estados de la región y no una esperanzada apertura hacia la
democratización y modernización de estas sociedades.
Ante el drama del
Estado de Israel que, ante la islamización de Egipto y la probable caída del
régimen tambaleante del Rey de Jordania, quedaría en la precaria situación de
no tener países aliados estratégicos con quien dialogar en este salvaje Oriente
Medio.
Con un inédito y
lamentable aporte del ingenuo presidente Barak Obama que comenzó su mandato
presidencial con viajes a Turquía, Egipto y Arabia Saudita y que con
grandilocuentes disertaciones en Ankara y El Cairo intentó hermanar
a los Estados Unidos con el mundo islámico. "Yo soy uno de
ustedes" y "El Islam tiene una orgullosa tradición de
tolerancia, algo que vemos en la historia de Andalucía y Córdoba durante la Inquisición. Es el
ejemplo de Al Ándalus".
Agravado con la intervención
occidental en Afganistán liderada por la administración Obama que se encamina
irremediablemente al rotundo fracaso pues los talibanes se fortalecen cada vez
mas y de no mediar un cambio muy rápido de estrategia, este Islam radical
dominaría ampliamente toda esa región asiática en los próximos tiempos.
Hoy, la islamización
de Egipto da un golpe definitivo al endeble y desorientado Barack Obama
con un oscuro escenario donde la potencia que preside se perfila a perder las sólidas
alianzas estratégicas que poseía con Turquía, Arabia Saudita y otros países
importantes del Oriente Medio.
Se cumple
inexorablemente la visión realista de los mas lúcidos expertos en Medio Oriente como
Guy Bechor, director del Departamento de Medio Oriente en el Instituto
Interdisciplinario de Hertzlia: "Si Egipto cae, Irán estará esperando a
la vuelta de la esquina y puede caer toda la región. Está claro que el único
cambio en el que pueden terminar las revueltas actuales no es en favor de la
democratización, sino de la toma del poder por parte del Islam radical. Esas no
son buenas noticias para Israel".
Ante la concreción
de la islamización de Egipto. Benjamin Netanyahu expresa: "Israel honra
el proceso democrático en Egipto y respeta sus resultados. Israel espera que
prosiga la cooperación con el Gobierno egipcio sobre la base del acuerdo de paz
entre los dos países que es un interés de ambos pueblos y contribuye a la
estabilidad regional." ¿Diplomacia o infantilismo político?
Pero las
multitudinarias masas que ocupan las calles de El Cairo están expuestas a ser
miserablemente manipuladas por el Islam radical y destinados a ser los próximos
súbditos de retrogradas y medievales republiquetas islámicas como ya ocurrió
con Irán.
¿Estamos frente a la incapacidad más absoluta de evitar la aparición de
nuevas Republicas Islámicas de Irán?
¿Estamos ante el comienzo de la era de las
tinieblas?
"Nunca temas a las sombras. Sólo constituyen el indicio de que en algún
lugar cercano hay una luz resplandeciente". Ruth Renkel
Dr. Guido Maisuls
Buenos Aires,
Argentina.
"En una época de engaño universal, decir la verdad es un
acto revolucionario" George
Orwell.