11 de septiembre de 2011

La noche que intentaron linchar la Paz




Mientras miraba las increíbles y dantescas imágenes de las multitudinarias y enardecidas turbas en El Cairo, sentía la sensación de estar observando un mundo muy complejo y siniestro, regido por extrañas e impenetrables reglas muy difíciles de comprender a priori de un análisis profundo.

Un escenario extraído de una  novela de Franz Kafka y centrado en un Medio Oriente complejo, retorcido y laberíntico. En este preciso momento donde se encuentran y se enfrentan todos los intereses y los actores de la comunidad internacional. En un extraño escenario donde se juegan simultáneamente varias partidas de ajedrez al mismo tiempo.

Este ultimo viernes, una gran turba enfurecida y armada con objetos contundentes, barras de hierro y sogas, derribaron la valla de protección de la Embajada de Israel en el Cairo, destruyendo, incendiando y poniendo en serio peligro de vida al personal diplomático de este autentico símbolo de la Paz entre Egipto e Israel.

Un oscuro y siniestro espectáculo medieval, enmarcado y protagonizado por realidades circundantes y actores protagónicos que se influyen y potencian mutuamente:

Una amenazante presencia de las organizaciones terroristas como Hamas y Hezbollah – patrocinados por Irán – que intimidan a la dirigencia árabe, con el inevitable fortalecimiento del Islam radical en lugares como Egipto, Jordania y Arabia Saudita.

Un autoritarismo absolutista y corrupto que ya se tambalea torpemente como el los regímenes pro-occidentales árabes que solo desean conservar "el status quo" pues cualquier posibilidad de cambio constituye una amenaza a sus arraigados privilegios de “las mil y una noche”.

Un Egipto que estuvo desde hace mucho tiempo intentando  - sin éxito - contener la creciente popularidad de la Hermandad Musulmana y el Rey de Jordania que estuvo esforzándose de la misma manera y con los mismos resultados frente al Frente de Acción Islámica.


Unos apaciguadores dirigentes europeos y norteamericanos que desean sembrar una supuesta paz forzada y contranatural con un telón de fondo tan inhóspito y salvaje, que solo sirve para recubrir sus múltiples y permanentes intereses estratégicos y económicos.

Un Islam radical (Irán, Al Kaeda, Hezbollah, Hamas, Hermanos Musulmanes, etc.) que continúa trabajando a tiempo completo para expulsar "las satánicas" influencias occidentales en la región y a afirmar las medioevales bases de una sociedad cerrada y autoritaria.

Una Franja de Gaza donde todo continua igual, donde los cambios no existen y ni siquiera son ficticios, con su población cada vez mas paupérrima y hambrienta que nunca, gobernada por las mismas bandas de facinerosos (esta vez sin Al Fatah) y mantenida por la asistencia para los refugiados de la ONU, por donaciones humanitarias directas de gobiernos de Europa y del Golfo y por el aporte permanente, económico, militar e ideológico y ya no tan solapado de los clérigos iraníes.

Una frontera entre Egipto y Gaza a través de la cual el gobierno egipcio no hace absolutamente nada para frenar el contrabando de armas y terrorismo desde el Sinaí hacia la franja. Un Egipto pasible de convertirse hoy en la pesadilla tan temida de caer en poder de un régimen simpatizante con Hamas.

Una estrategia de Hamás consistente en  bloquear el proceso de paz y negar a Israel el derecho a existir que  podría lograr en este contexto la posibilidad de acumular fuerzas y relaciones en la región para ganarse definitivamente la calle palestina.

Una ventaja arrolladora obtenida por Siria e Irán frente a los europeos y norteamericanos en el Líbano que permite que  la Hizbolláh se apodere del gobierno libanés y cree un creciente foco de inestabilidad e inseguridad en la frontera norte de Israel, ahora si peligrosamente pegada al Irán nuclear de Mahmud Ahmadinejad.

Una cada vez mas importante presencia del Islam radical en el Cairo, una potente señal de que los Hermanos Musulmanes se están movilizando y preparando activamente  para acceder al poder. Esta organización fundamentalista islámica se esta convirtiendo en una protagonista muy importante y uno de los principales referentes del Islam radical egipcio.

Un alarmante escenario probable pronosticado por los especialistas en medio oriente que es la rápida islamización de Egipto y de varios estados de la región  y no una esperanzada apertura hacia la democratización y modernización de estas sociedades.

Una superflua e irresponsable decisión de muchos países latinoamericanos, de reconocer unilateral e incondicionalmente a un supuesto e inexistente Estado Palestino. Decisiones que solo fortalecen a quienes se niegan a reconocer y aceptar la existencia de Israel como un estado judío, a quienes desean evitar unas autenticas negociaciones directa de paz y obtener todo de Israel sin dar absolutamente nada a cambio.

Un Estado de Israel que ante la caída de Mubarak y el posible derrumbe del régimen tambaleante del Rey de Jordania quedaría en una precaria situación de no tener países aliados estratégicos con quien dialogar en este salvaje Oriente Medio.

Un presidente como  Barak Obama que comenzó su mandato presidencial  con viajes a Turquía, Egipto y Arabia Saudita y con grandilocuentes disertaciones en Ankara y El Cairo intentó  hermanar  a los Estados Unidos  con el mundo islámico.  "Yo soy uno de ustedes" y "El Islam tiene una orgullosa tradición de tolerancia, algo que vemos en la historia de Andalucía y Córdoba durante la Inquisición. Es el ejemplo de Al Ándalus".

Una intervención occidental en Afganistán liderada por la administración Obama que se encamina irremediablemente al rotundo fracaso pues los talibanes se fortalecen cada vez mas y de no mediar un cambio muy rápido de estrategia, este Islam radical dominaría ampliamente toda esa región asiática en los próximos tiempos.

Un  endeble y desorientado Barack Obama que puede llegar a lograr algo muy similar ya que la potencia que preside se perfila como una firme candidata a perder las alianzas estratégicas tan sólidas que posee con Turquía, Egipto, Arabia Saudita y quien sabe que otros países mas  del Oriente Medio.

Una opinión del Dr. Dan Schiftan, Director del Instituto  de Seguridad Nacional de la Universidad de Haifa.  “No tengo duda alguna. Aunque esto se plantee como una ola de reivindicaciones sociales y de apertura política, finalmente los radicales islámicos serán los que determinen el resultado y se adueñen de la corriente. De aquí, estoy seguro que no se va a ningún tipo de democracia ni pluralismo”.  

Un punto de vista de Guy Bechor, director del Departamento de Medio Oriente en el Instituto Interdisciplinario de Hertzlia: "Si Egipto cae, Irán estará esperando a la vuelta de la esquina y puede caer toda la región. Está claro que el único cambio en el que pueden terminar las revueltas actuales no es en favor de la democratización, sino de la toma del poder por parte del Islam radical. Esas no son buenas noticias para Israel".

Una visión del general en la reserva y analista israelí, Yaacov Amidror: "La consolidación de las protestas callejeras contra las dictaduras relativamente moderadas árabes no significa necesariamente la llegada de más democratización y libertad. En Irán, muchas fuerzas entre ellas las más liberales iniciaron la revolución contra el Sha y al final el movimiento islamista y los ayatollás crearon un ente totalitario y mucho más bárbaro que el del Sha".

Todos los manifestantes de las calles y plazas de Egipto, Túnez, Argelia, Siria, Libia, Jordania, Yemen, Marruecos y otras naciones árabes también candidatas presentes y futuras al gran terremoto, tienen el legítimo derecho de salir en sus ciudades a protestar y a exigir que caigan esos regímenes corruptos, vitalicios y hereditarios.

Regímenes que por medio de elecciones fraudulentas se eternizaron en el poder para hacer reinar el despotismo, el privilegio y la falta de libertad. Sistemas perversos que  mantienen encarcelados a sus sufrientes poblaciones en la pobreza, la ignorancia y la desesperanza.

Pero estas multitudinarias masas que ocupan las calles desgraciadamente están expuestos a ser miserablemente  manipulados por el Islam radical y destinados para ser futuros súbditos de retrogradas y medievales republiquetas islámicas como ya ocurrió con Irán.

¿ Estarán estas anónimas y espontáneas turbas multitudinarias conscientes hacia donde se dirigen ?

¿ Serán un torpe instrumento del fundamentalismo islámico para incendiar el medio oriente y posiblemente el mundo?


¿ Y tu que opinas ?



Dr. Guido Maisuls
11 de septiembre de 2011.

Si no soy yo ¿quién?, si no es ahora ¿cuando?
si es solo para mí, ¿de que sirve?

(Hillel)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Guido!! excelente tu comentario con el q coincido. Después de la 2da Guerra Mundial estamos en el periodo de mayor oscuridad mundial.Que para mi entender comenzó el 11-S q recordamos hoy. Todo lo q nos rodea nos avisa q nos encaminamos a una hecatombe mundial basada en la falta de moral, de ética y DE AMOR X LA VIDA EN PAZ. "El q NO piensa y siente como yo, NO merece vivir y x lo tanto lo mato de la peor manera"...ése es el pensamiento en el cual se basa el Islam de hoy y en muchos otros países del planeta q NO profesan la religión islámica pero igualmente ODIAN a todo lo q sea distinto a ellos. En Argentina, Venezuela y otros parajes vivmos eso también. Tenemos remedio inmediato para este horror? Creo q NO. El remedio yace en una educación mundial para la PAZ, la buena convivencia y el respeto para el q piensa distinto. Educar incluso a los políticos para q gobiernen A FAVOR de TODOS en sus países: sin hambre, sin corrupción, con verdadera Justicia social. Los q vivimos HOY y queremos PAZ debemos mantenerla dentro nuestro a pesar del horror cotidiano q vemos y vivimos. Tendremos q morir gritando QUEREMOS PAZ y esperar q por la gran AMORALIDAD Y ODIO imperante, las cosas colapsen o implosionen SIN REMEDIO. Tal como colapsó en viejo Imperio Romano y el régimen nazi.
Lamento NO ser optimista. Yo y mi alma, vivimos un drama cotidiano por lo q nos toca vivir y morir día a día...
Me alegra de saberte en Argentina,
quizás vos veas lo mismo que yo en este bendito y a la vez desgraciado país...
SHALOM!

CAIA