Muchas veces me pregunto. ¿porque escribo? ¿para que? ¿para quién? ¿para mi o para los demás? ¿que necesidad interior me impulsa a expresar lo que veo, lo que siento y lo que ocurre dentro de mi al mirar a mi alrededor, a mi ciudad, a mi país y al mundo?
"Escribir es una forma de terapia. A veces me pregunto cómo se las arreglan los que no escriben, los que no componen música o pintan, para escapar de la locura, de la melancolía, del terror pánico inherente a la condición humana"
Graham Greene, escritor inglés
Cuando leo los periódicos, escucho y veo las noticias y sinceramente en pocas y especiales oportunidades me impactan con placer, alegría, optimismo y esperanzas, pero la mayoría de ellas origina en mi bronca, decepción, tristeza y desesperanza y no solamente por mi persona, también por mi familia, por mis amigos y por mis hermanos del mundo y entonces siento dentro de mi ese viejo mandato del Talmud: Si no soy yo ¿quien?; Si no ahora ¿Cuándo? Y entonces nace, crece y se agiganta mágicamente esa casi fantasía, esa inconciente utopía, ese original mito de corregir este mundo contradictorio, a veces pleno de poesía, de belleza, de bondad y de justicia y otras donde imperan la tristeza, la violencia, la mentira, la hipocresía y ahí justamente me aparece un Robin Hood interno e inconciente, con ganas de retocar este mundo, de mejorarlo, de cambiarlo aunque sea en una coma, con la única herramienta que dispongo, con ese arma que no mata ni hace daño, que no son piedras ni espadas filosas, pero que puede contener mucho poder, poder de reflexión, poder de dialogo, poder de cambio, mucho poder en simples palabras desde un clásico teclado de computadora o de esa negra tinta que se derrama sobre un papel blanco.
No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario. No dejes de creer que las palabras y las poesías si pueden cambiar el mundo.
Walt Whitman
En una cruda, fría y lluviosa mañana del invierno israelí, me desperté muy temprano con la mas firme y decidida determinación de escribir, de volcar al teclado de mi computadora las mil ideas que venían jugando durante el sueño en mi mente, pero vaya sorpresa desagradable, la computadora estaba muerta y no encendía, dejándome en una situación de profunda frustración e impotencia pocas veces vivida en mi no tan corta vida y entonces surgió en mi interior, como un torrente de agua de una fuente subterránea, un firme deseo, un gran desafío de escribir de cualquier forma, de volver a mis orígenes de la década de los sesenta, donde el mundo de los sueños se sostenía con el lápiz, la lapicera fuente o la mas moderna birome e inclusive la antigua maquina de escribir Olivetti que me regalaron mis abuelos paternos como sagrado tributo a ese joven nieto. Fue una experiencia distinta, terapéutica y casi mística, de volver a mi prehistoria literaria y a mi vocación artesanal, de volcar mi mundo interno con mi mano derecha y sobre un simple papel blanco, transformar esa energía espiritual en líneas de color negro, una tinta que se desparramaba por ese blanco campo, queriendo decir lo indecible, buscando expresar lo inexpresable, persiguiendo esa utópica y estrafalaria idea de reparar el mundo y hacerlo perfecto, como cuando era pequeño, como cuando comencé a escribir esas letras sueltas que luego formarían esas simples palabras: mama, papa, amar, vivir…………
Escribo para evitar que al miedo de la muerte se agregue el miedo de la vida"
Augusto Roa Bastos, escritor paraguayo
Hoy escribo para ustedes, para todos los que llamo mis hermanos del mundo, Escribo para ti, sin importarme tu ideología y sus falsas interpretaciones de izquierdas o de derechas. Sin importarme el color de tu piel, ni tu edad, ni tu sexo, ni tu condición socioeconómica, ni tu nacionalidad, ni tu idioma aunque mi español natal me acompañe desde que estaba en el vientre de mi madre. Sin importarme tus creencias religiosas porque estoy seguro que Mi Dios y el Tuyo es el mismo. Escribo exclusivamente para aquellos que compartan conmigo el paradigma de una justicia digna para todos, para los que luchamos por conquistar una paz autentica y verdadera sin hipocresías ni especulaciones, para los que soñamos con la verdadera felicidad de compartir entre todos esta creación perfecta: Nuestro Mundo.
Antonio Soler, escritor español
Carpe diem quam minimum credula postero.
Aprovecha el día, no confíes en mañana.
Querido Lector: Tu estas pleno de sueños, tu ser rebasa de talentos y estoy seguro de que deseas modificar en tu entorno de las muchas cosas que no te gustan de tu vida y la de aquellos seres a los que tanto amas y por eso te digo: Aprovecha el momento, Vive el momento, Aprovecha la oportunidad y no esperes a mañana, porque puede ocurrir que mañana la oportunidad ya no exista.
Yo te considero como una parte fundamental e inseparable de los Míos, de Nosotros, Los Poetas Vivos.
La Sociedad de los Poetas Muertos
(Walt Whitman)
No dejes que termine el día, sin haber crecido un poco,
sin haber sido feliz, sin haber aumentado tus sueños.
No te dejes vencer por el desaliento.
No permitas que nadie te quite el derecho a expresarte,
que es casi un deber.
No abandones las ansias de hacer de tu vida algo extraordinario.
No dejes de creer que las palabras
y las poesías si pueden cambiar el mundo.
Pase lo que pase nuestra esencia esta intacta.
Somos seres llenos de pasión.
La vida es desierto y oasis.
Nos derriba, nos lastima, nos enseña,
nos convierte en protagonistas de nuestra propia historia.
Aunque el viento sople en contra, la poderosa obra continuara:
Tu puedes aportar una estrofa.
No dejes nunca de soñar, porque en sueños es libre el hombre.
No caigas en el peor de los errores: el silencio.
La mayoría vive en un silencio espantoso.
No te resignes. Huye.
"Emito mis alaridos por los techos de este mundo", dice el poeta.
Valora la belleza de las cosas simples. Se puede hacer bella poesía sobre
pequeñas cosas, pero no podemos remar en contra de nosotros mismos.
Eso transforma la vida en un infierno.
Disfruta del pánico que te provoca tener la vida por delante.
Vívela intensamente, sin mediocridad. Piensa que en ti esta el futuro
y encara la tarea con orgullo y sin miedo.
Aprende de quienes puedan enseñarte. Las experiencias de quienes nos
precedieron de nuestros "poetas muertos", te ayudan a caminar por la vida.
La sociedad de hoy somos nosotros, los "poetas vivos".
No permitas que la vida te pase a ti sin que la vivas ....
Aunque el viento sople en contra, la poderosa obra continuara...
...No dejes nunca de soñar, porque en sueños es libre el hombre. No dejes que termine el día sin haber crecido un poco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario