25 de febrero de 2009

"La guerra es terriblemente inútil"

"Vals con Bashir"

 

Israel tiene una cualidad extraordinaria que desgraciadamente hoy no la poseen la mayoría de los países de la región y es precisamente la elección de vivir en un sistema de absoluta democracia. Una creación humana e imperfecta que nos permite a los ciudadanos poder desarrollar nuestros talentos en una forma completamente libre, permitiendo y potenciando la autorreflexión, la autocrítica, la capacidad de disenso y el pluralismo de ideas y sentimientos. En este marco surgen figuras como el ex soldado israelí, Ari Folman, que nos demuestra con su historia personal, talento y creatividad, de que "La guerra es terriblemente inútil"

 

He rodado "Vals con Bashir" desde el punto de vista de un soldado cualquiera, y solo puede concluirse que la guerra es terriblemente inútil. No tiene nada que ver con las películas estadounidenses. No tiene nada de glamoroso ni de glorioso. No son más que hombres muy jóvenes, que no van a ninguna parte y que disparan contra desconocidos, les disparan desconocidos, y que vuelven a su casa intentando olvidarlo todo. Algunas veces lo consiguen. Pero no ocurre en la mayoría de los casos. Ari Folman.

 VALS CON BASHIR (Israel, Francia, Alemania; 2007). Director y guionista: Ari Folman.

 

 


En 1982 Israel decidió invadir el Líbano y como todas las guerras en las que ha participado ha sido con fines defensivos. Entre 1965 y 1982, el terrorismo palestino asesino a 1.392 personas e hirió a otras 6.237. Al comienzo de los ochenta, Yasser Arafat decidió desarrollar bases terroristas en el sur del Líbano para acosar al norte israelí; cuando los cristianos libaneses se enteraron de que se iban a trasladar a miles de terroristas a esa región, buscaron alarmados ayuda de Israel. La invasión israelí produjo la expulsión de más de quince mil terroristas palestinos del Líbano pero la Organización de Liberación de Palestina que no estaba dispuesta a darse por vencida, recurrió al atentado terrorista: el asesinato del presidente libanés Bashir Gemayel.


Es mi historia personal. La película empieza el día que descubrí que algunas partes de mi vida se habían borrado de mi memoria. Los cuatro años que trabajé en "Vals con Bashir" me provocaron un violento trastorno psicológico. Descubrí cosas muy duras de mi pasado y, sin embargo, durante esos cuatro años, nacieron mis tres hijos. Puede que lo haya hecho para mis hijos. Para que, cuando crezcan y vean la película, les ayude a saber escoger, a no participar en ninguna guerra. Ari Folman.

Un 14 de septiembre de 1982 en Beirut, el presidente electo libanés y líder maronita, Bashir Gemayel y cuarenta personas más fueron asesinados en un tremendo atentado en la sede de la milicia cristiano-falangista aliada de Israel. El 16 de septiembre de 1982 las falanges cristianas libanesas ingresaron en los campamentos de refugiados de Sabra y Shatila en búsqueda de terroristas pero terminaron masacrando según el informe de la Cruz Roja a 328 palestinos varones, 15 mujeres y 20 niños además de 109 libaneses, 21 iraníes, 7 sirios, 3 pakistaníes y 2 argelinos. La matanza había sido realizada única y exclusivamente por las falanges libanesas sin participación alguna de tropas israelíes o de sus mandos. No quedan dudas sobre los responsables de la masacre y también de que los militares israelíes no dieron ninguna orden pero lo que queda en discusión es si estaban o no con conocimiento cabal de lo que iba a ocurrir.


La búsqueda de recuerdos traumáticos enterrados en la memoria es una forma de terapia. La terapia duró lo que la producción de la película, cuatro años. Durante este tiempo, pasaba de la depresión más absoluta, fruto de los recuerdos que me volvían a la memoria, a la euforia más desbordante por hacer una película de animación innovadora, que iba mucho más rápido de lo que había esperado. Si fuera un loco de la psicoterapia, diría que realizar la película me ha transformado profundamente. Ari Folman.

 

La guerra es la peor de las tragedias que nos pueden ocurrir a los seres humanos, es la forma mas errónea que disponemos los hombres para demostrar nuestra imperfección, es nuestra reiterada incapacidad de resolver nuestras diferencias por otros medios mucho mas racionales y lógicos, mucho mas humanos. El logro mas elevado al que podemos aspirar, es llegar algún día a comprender y  a concretar esta lucida y profunda conclusión de Ari Folman:

 

"La guerra es terriblemente inútil"

 
Dr. Guido Maisuls

 

"…Con sus espadas forjarán arados
y con sus lanzas podaderas.
No levantará la espada una nación contra otra
ni se adiestrarán más para la guerra".

 

 

Referencias:

 

Entrevista con Ari Folman:

http://www.golem.es/valsconbashir/

 


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