´´La Debilidad de Israel´´

Luego de haber sido invitado a desarrollar varias conferencias y debates sobre la actual situación de seguridad de Israel y en el contacto con muchas y heterogéneas opiniones, siempre surgen polémicas con respecto a los talones de Aquiles o debilidades y los cabellos de Sanson o Fortalezas actuales de nuestra Israel.

Sabemos que todas las sociedades humanas tienen sus Fortalezas y sus Debilidades en su devenir histórico y estas se manifiestan claramente al enfrentar los riesgos que las acechan y por supuesto que Israel esta lejos de escapar a esta regla.

Hablando de Fortalezas y Debilidades fue emblemática la comparación entre la sociedad israelí y el fundamentalismo islámico realizada en el discurso que pronunció el Jeque Hassan Nasrallah el pasado 23 de mayo de 2006 y que fue transmitido por Al-Manar TV.

"La debilidad de la entidad sionista es 'su fuerte adhesión a este mundo, nuestra fuerza es la voluntad de sacrificar nuestra sangre y nuestros hijos…"

"Esta entidad [sionista], la cual tiene muchas fuerzas - no tengo tiempo ahora para enumerarlas a todas - tiene debilidades también, como individuos y como colectividad, son descritos por Alá como 'el pueblo que cuida más su vida'. Su fuerte adhesión a este mundo, con todas sus vanidades y placeres, constituye una debilidad ".

"En contraste, nuestro pueblo y la voluntad de nuestra nación de sacrificar su sangre, sus almas, sus hijos, sus padres, y sus familias por la causa del honor, la vida, y la felicidad de la nación, siempre ha sido una de las fortalezas de nuestra nación".

Se equivoca y muy grande, el Jeque Nasrallah, ya que esta gran debilidad, este apego a la vida, es realmente la gran Fortaleza de Israel; que no la inventa en forma espontánea en su creación como Estado ni la importa de ningún mercado sofisticado del mundo, simplemente la hereda de los valores que permitieron sobrevivir al pueblo judío en condiciones adversas y extremas, teniendo que optar permanentemente entre la vida y la muerte, eligiendo siempre la vida, durante los amargos 2000 años de su diáspora, expulsados de sus hogares, obligados a conversiones forzosas, quemados en la hogueras de la inquisición, masacrados en los caminos de las cruzadas, exterminados en los campos nazis, segregados y discriminados en los guetos de la vieja y culta Europa o de las exóticas mil y una noches musulmanas, vagando por el mundo como extranjeros, como los desheredados de la tierra, como los eternos errantes y se logra triunfar, pues no solo se consigue sobrevivir también se concreta el sueño de retornar y construir nuestro propio Estado y todo gracias al simple, natural y elemental recurso: El apego a la Vida, El Amor a la Vida.

Estamos viviendo momentos críticos y decisivos, las amenazas se ciernen sobre nosotros, el fundamentalismo islámico aliado a las fuerzas mas irracionales, oscuras y primitivas del planeta quieren borrarnos del medio oriente y del mundo. Tenemos muchas debilidades a las cuales debemos sobreponernos: La corrupción imperante en vastos estamentos sociales, la declinación de valores tradicionales como la solidaridad y justicia social y la vanalización de nuestra dirigencia política.

También poseemos Fortalezas, que residen fundamentalmente en el espíritu de nuestra gente, de nuestros trabajadores, de nuestros soldados, de nuestros niños, de nuestros ancianos, de nuestros Sabras y de nuestros Olim.

Nuestra gran Fortaleza fue y seguirá siendo nuestro apego a la vida cotidiana, a las familias, a los amigos, a la tierra, a las instituciones, al futuro. Nuestra gran Fortaleza es luchar por la vida para que nuestros hijos, nuestras almas y nuestra sangre vivan para siempre.

Nuestra gran Fortaleza es el Amor a la Vida.